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¿Cómo queda el departamento después de la elección?
Pues queda mucho más fuerte, con mayor capacidad de buscar recursos. Yo quiero convocar a los nuevos parlamentarios y a las nuevas parlamentarias para que nos propongamos lograr los ingresos que se requieren para el bienestar de Santander. Que veamos la manera de ser positivos en alcanzar satisfacciones para nuestros territorios.
Ahora bien, a todas y a todos quiero invitarlos a que hagamos un foro con los candidatos presidenciales aquí en Santander, sobre un tema fundamental, que es el de la descentralización. Traigamos a todos los candidatos y candidatas, preguntémosles qué harían en torno a la descentralización si fueran electos. Estoy también muy contento con la experiencia del voto Caribe alrededor de la región. Porque si se abre región en el Caribe, tenemos que abrir nosotros también región en el nororiente colombiano.
¿Cómo quedó su invitación a los santandereanos a que votaran masivamente?
Pues… se aumentó en 100.000 votos la votación que hubo hace cuatro años, que son las elecciones con las cuales se deben comparar éstas. Pero no alcanzamos una cifra mayor, como la que yo les había dicho a los santandereanos: “hagamos un esfuerzo para que un millón de personas salga a votar”. ¿Qué pienso? Uno: el censo electoral puede estar inflado. Dos: hay personas a las cuales les parece que no es importante todavía el Congreso. Tres: otros piensan que como el Congreso no ha sido excelente, sino que ha tenido baches y dificultades (sumado a que mucha gente no ha resultado con buenas cuentas), entonces “toca no votar”. Pero es al revés: lo que toca es votar. Yo quiero repetirles a mis paisanos que a los malos congresos los eligen los buenos ciudadanos que no votan.
¿Que se haya fortalecido el voto de opinión, qué significado tiene para la cultura política del país?
El voto de opinión no salió bien librado, realmente. Yo pienso que la votación la pusieron especialmente los partidos. Pero bueno, para eso son los partidos, para que manejen la política. Creo que faltó mucha gente por votar. Aunque Santander dio un ejemplo extraordinario. Y miren: sin que esto sea intervención en política, yo me siento muy contento si llega a ser verdad lo que me acaban de decir hace un minuto: que el departamento donde hubo más votación liberal fue en Santander. Lo digo sin sectarismo. Pero, cómo no me voy a alegrar…
¿O sea que Santander le dio ejemplo al país?
Hay que mantener ese ejemplo que damos en Santander. Aquí vivimos unidos con los sectores empresariales y gremiales, y con la expresión académica. Eso es muy bueno, y no quiere decir que no haya contienda política, sino que cuando se trata de pensar en el bienestar, debemos estar todas y todos juntos. Me parece que este es un magnífico ejemplo. Pero estoy contento porque hubo seriedad, hubo responsabilidad, hubo una votación grande, cercana a los 700.000 votos. Eso es bastante. Faltó un poco, pero bueno, vamos a seguir insistiendo.
¿Perdimos el liderazgo en la entrega de resultados?
Sí, en otras ocasiones Santander era el primero, ¿no? La Registraduría tiene mucho que reivindicar en las próximas elecciones, para que de nuevo renazca la confianza en la organización electoral.
¿Qué piensa de las supuestas trampas que se hicieron?
Pues ahora que estaba examinando lo que decían, que había mucha plata, que presionaban, que engañaban, yo me digo: si todos tienen que votar, y si para elegir congresistas todos votaran por listas cerradas, y el elector votara por el partido y así eligiera por guarismos un número determinado de congresistas, de esa manera ya no habría quién tratara de comprar votos a $20.000 o de engañar a la gente con chucherías.
Mucha gente se quejaba por lo difícil que era entender el tarjetón.
Sí, faltó mayor pedagogía y falta hacer las cosas más simples. Ese tarjetón era un jeroglífico tremendo. Es algo que se debe examinar mejor para la próxima.
¿Es saludable escoger a los candidatos presidenciales a través de las consultas?
¡Claro! Las consultas son muy importantes para que haya más participación y para que las decisiones del partido no sean fruto de las decisiones de un sanedrín, sino consecuencia de la participación de la militancia. Yo siempre he alegado que haya consultas. Pero que las consultas se hagan entre la militancia. Y debieran ser obligatorias. Lo que pasa es que alguien dice “bueno, pero nosotros tenemos es un partido que le da esa responsabilidad a la jerarquía, entonces ¿por qué nos quitan ese derecho?” Pero yo veía a mucha gente liberal pidiendo el tarjetón verde. Eso es doble militancia. Eso no se debe hacer. Uno no debe interferir en la vida interna de los otros partidos. Es que la política es muy seria. La política tiene que manejarse con mucha responsabilidad. Es como cuando uno está en una religión y respeta sus principios religiosos, y no se mete con los principios de otras religiones, ¿verdad?
A usted le abrió investigación la Procuraduría por intervenir en política, pero el Presidente Uribe no hace otra cosa que intervenir en política. ¿Cómo ve usted esa situación?
Lo que yo digo es que no he intervenido en política electoral. En política social sí y en política gubernamental también. Ahora, lo que he dicho es algo supremamente natural: que uno pertenece a un partido y que uno vota por los candidatos de ese partido. Por supuesto que yo voté por los candidatos de mi partido, el Liberal. De manera que eso no es intervenir en política. Y el mejor ejemplo que doy es que he escuchado a dos candidatos de la oposición decir que en Santander sí hubo garantías. Aquí hubo un comportamiento transparente de las autoridades. No hubo persecuciones, no se utilizó el poder para favorecer a nadie, la gente votó libremente.
Pero, ¿cree usted que el Presidente está interviniendo o no en política?
(SE RÍE) Eso pregúnteselo a la Procuraduría…
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